Mis diputados no me avergüenzan

Una característica típica de los medio de comunicación consiste en señalarnos cual es el sentimiento que debemos albergar ante diversas circunstancias de la vida. El poder hegemónico de los medios de comunicación sobre nuestras personas y sobre nuestros sentimiento ha determinado que si las empresas televisivas deciden realizar un programa para recaudar fondos a favor de determinada causa, el sentimiento preciso que debemos tener es el que estos mismos medios determinan.

Así pues, si se organiza una colecta a favor de los discapacitados, uno debe sentirse (y expresarlo por medio de la chequera) solidario con los desafortunados.

Si la temporada es la navideña, uno debe sentir amor por los semejantes y demostrarlo comprando los productos que se anuncian en la televisión para nuestros seres queridos.

De esta y de muchas formas más se cierran los círculos en donde el ganador de siempre es Emilio Azcarraga o Salinas Pliego.

Hoy, y a raíz de los acontecimientos que se iniciaron ayer en la cámara de diputados, los merolicos de los medios de comunicación, se encargan (por nosotros) en señalar que “todos los mexicanos” sentimos una gran vergüenza por el zafarrancho legislativo.

Y entonces basta con que Javier Alatorre o Joaquín López Doriga señalen lo anterior, para que el grueso de la población actué como autómata y, efectivamente, empiece a sentir una profunda indignación por lo acontecido en San Lázaro, solo y únicamente, porque eso fue lo que dijeron que deberíamos de sentir en la televisión.

Por lo que a mi respecta, la actuación de mis legisladores no me avergüenza, y si se agarran a putazos que bien que así sea, es un enfrentamiento entre iguales. Y no como se esta haciendo costumbre en el país, que cualquier manifestante contrario al gobierno siempre resulta reprimido con todas las ventajas de las fuerzas del estado.

En esta ocasión, se enfrentan uno a uno, legisladores contra legisladores, individuos con fuero, contra otros individuos que también tienen fuero.

En la historia de la humanidad así es como siempre se han conseguido las cosas y no veo porque esto tenga que cambiar. PERO SIMPRE ENTRE IGUALES.

De esta forma queda al descubierto ese ridículo discurso panista de: somos los pacíficos, y para muestra esta fotografía de la diputada PANISTA que contraviniendo toda la información sobre que la violencia siempre se ejerce contra las mujeres, la emprende a botellazos en contra de un diputado que infructuosamente intento subir a la tribuna mas alta del país.

Ambos bandos han tirado putazos, y que bueno que así sea. Que los perredistas no han logrado tomar la tribuna, pues que le chingen, que la gente que nos hemos manifestado en todos y cada uno de los llamados de López Obrador nos hemos partido la madre de muchas formas para estar ahí y darle vida al movimiento. Ahora les toca a ustedes, chingenle!

P:D.

Por cierto, a la diputada panista que tiene el brazo de oro, yo le ofrezco, cuando termine su gestión legislativa, un papel estelar en una producción cinematográfica de corte Porno Hard que pienso realizar en el futuro. Me cautivo de sobremanera la cara de puta que tiene y el formidable trabajo estético en ese par de glándulas mamarias que se carga.

….sorry, este no es un blog serio